Antes de comenzar su conferencia titulada “Regresando del progreso”, con la que Fernando Savater inauguró el día 25 de abril en el Taro de Tahíche, el programa de actividades culturales del centenario, expuso algunas consideraciones sobre César Manrique:
“En el mundo, afortunadamente, hay muchos grandes artistas, personas que han dedicado su vida a crear belleza y a enseñar a los demás a mirar el mundo. Pero pocos casos hay como el de César Manrique, de haberse convertido, de alguna manera, en un maestro, no solamente en un artista, en un guía, sino en un maestro que enseña a mirar el paisaje, las realidades naturales; que escucha a la naturaleza y no simplemente, sin tratar de imponer un patrón inventado por él, sino que deja que hablen las realidades que existen y las reinterpreta de forma artística.
Verdaderamente, esa simbiosis arte-naturaleza que logró Manrique, a mi parecer, es uno de los casos más extraordinarios de Europa. No creo que haya muchos sitios en el que haya triunfado, de tal modo, una visión no agresiva del arte en la naturaleza, y en un paisaje.
Estas cosas, naturalmente, para ustedes, los que viven en Lanzarote, serán muy sabidas y no presentan dudas, pero que esto se sepa y que se sepa fuera, y que la gente calibre su importancia en un mundo en que todo se va homogeneizando por muy diferentes razones (a lo mejor algunas saldrán en esta charla) creo que es importante. Creo que es importante destacar lo que puede, todavía, una personalidad, una individualidad, marcada, señalada… Lo que puede hacer por convencer a sus conciudadanos, por transformar su entorno vital y por convertir en magia un lugar espontáneo natural.
Por eso digo que me siento muy honrado y muy halagado de poder hablar con ustedes al día siguiente de la fecha exacta del centenario de César Manrique”.