José Juan Ramírez: acudir a la manifestación en contra de las prospecciones petroleras, es el mejor homenaje que podemos hacerle a César Manrique

La Fundación César Manrique (FCM) convocó en su sede a los medios de comunicación el 20 de marzo. Durante el desarrollo de la rueda de prensa, el presidente de la FCM, José Juan Ramírez, y el director de la institución, Fernando Gómez Aguilera, trasladaron a los medios de comunicación la posición de la FCM con respecto a las prospecciones petrolíferas e hicieron un llamamiento para que la sociedad insular se movilizara.

Concretamente, José Juan Ramírez, manifestó la inequívoca oposición de la Fundación César Manrique a las prospecciones petrolíferas previstas por Repsol frente a las costas de Lanzarote, Fuerteventura y La Graciosa, por los riesgos indiscutibles que se derivan sobre el principal recurso económico de estas islas, el turismo, y sobre su patrimonio natural.

Así mismo, hizo un llamamiento a la sociedad para movilizarse contra las prospecciones petrolíferas y a manifestarse contra la indiferencia y el desprecio del gobierno español hacia el sentir mayoritario de estas tres islas. Se refirió a este momento como un proceso largo en el que la manifestación del día 24 es sólo un punto de arranque de un largo camino que necesitará del aliento de todos. El presidente de la FCM expresó que “este año, que se cumple el 20 aniversario de la muerte de César Manrique, acudir a la manifestación del próximo sábado, es el mejor homenaje que podemos hacerle”.

Además, la FCM se empleará a fondo en desarrollar su oposición al proyecto de prospecciones. Anunció que la FCM recurriría a la vía jurídica, colaboraría en la concienciación social y la movilización, aparte de promover gestiones ante instituciones y organismos estatales y europeos.

Por su parte, el director de la FCM, Fernando Gómez Aguilera, se refirió a la legitimidad del proceso de autorización de las prospecciones y al riesgo que supone una actividad de ese tipo en las costas de dos Reservas de Biosfera como son Lanzarote y Fuerteventura. En sus palabras: Nos enfrentamos a un riesgo descomunal e innecesario para las dos Reservas de Biosfera, a una catástrofe terrible. De producirse un accidente, que, como bien se sabe, no son infrecuentes será una catástrofe ecológica, económica y social.

Respecto a la empresa petrolera Repsol, se refirió a su “discurso tóxico” de marketing expresando Nada que ver con la política de autoabastecimiento energético: Repsol vuelca el producto que extraiga en el mercado internacional, mercado Brent, donde España lo comprará.

Gómez Aguilera también aludió a los que llamó “empresarios de la gran patronal canaria”: Estamos asombrados y disgustados con los pronunciamientos de los diferentes miembros de la patronal canaria, no por que se posicionen a favor del petróleo. No esperábamos otra cosa teniendo en cuenta la acostumbrada finura de sus juicios a la hora de analizar la economía, (…) Nuestro asombro y enfado no proviene de ahí sino de su falta de consideración a Lanzarote y Fuerteventura, a sus instituciones democráticas y a sus ciudadanos. Cada cual puede posicionarse con respecto a este asunto como Dios le dé a entender, pero cuando hay una voluntad institucional y ciudadana tan clara, lo mínimo es pedir respeto. Vamos, que se contengan un poco, que guarden las formas, porque no están hablando de su casa sino de la nuestra, porque si, llegado el momento, hubiera un derrame, la basura, el drama iba a ser para nosotros, no para ellos. Pero quizá el negocio ciega y, de ahí, que nos traten como descerebrados. ¿Qué podemos deducir de sus opiniones públicas? Y recordó algunas de las expresiones de los empresarios. (…) En fin, molesta, que quienes claman y reclaman su propia seguridad jurídica, no duden a la hora de imponernos, si por ellos fuera, nuestra inseguridad de cara al futuro de la mano del petróleo. No acabamos de acostumbrarnos a ese complejo de superioridad de las islas capitalinas, que miren a Lanzarote por encima del hombro del dinero y los negocios como si aquí no se supiera seguir el son de la música. Y a nadie le gusta que le traten como si fuera el patio de atrás de la casa de otro.

También mencionó al empresariado local: Sorprende el silencio o la equidistancia o la asepsia o la distracción de la mayoría del empresariado local, de sus asociaciones, para defender el turismo y defender Lanzarote, su imagen, que tanto les preocupa en el caso de los hoteles ilegales cuando se airea el conflicto en la prensa nacional. Y se desentienden con el petróleo. Su silencio no se entiende y la sociedad toma nota de ello. ¿Callan porque temen enfrentarse al ministro de su ramo (industria y turismo)? ¿Callan por defender sus intereses particulares? ¿Callan porque están de acuerdo con el petróleo y no tienen el coraje de expresarlo públicamente? Pues que sepan que Lanzarote, en la que tantas veces se escudan, les necesita, necesita su pronunciamiento claro, que ya han tenido tiempo de informarse sobre el balance riesgos beneficios. Les pedimos que eleven la mirada y pongan por encima de sus ambiciones a la isla, a sus empleos (más del 75% del PIB insular proviene del turismo) y a las personas.   

Se ocupó en sus palabras del ministro de Energía y Turismo, José Manuel Soria, que fue calificado por Gómez Aguilera como de “ponerle un cero patatero”. Arrogante, antipático, agresivo, insensible con dos islas pequeñas, alejadas, incluso para él, y condescendiente con Valencia. Dos varas de medir, impropias de un ministro de todos los españoles y mucho menos de un ministro canario. Sería deseable —añadió— que el Gobierno de la nación recondujera la actuación del ministro Soria y encauzara esta cuestión, no vaya a ser que un asunto de petróleo acabe convirtiéndose en un problema de Estado. Canarias es zona sensible no sólo medioambientalmente sino también en términos políticos de relación con el Estado.

Por último, a los medios de comunicación, el director de la Fundación César Manrique les pidió respeto y altura de miras con Lanzarote y Fuerteventura. Y también rigor para discriminar y no convertir las mentiras interesadas en verdades acientíficas. César Manrique y Lanzarote les han enseñado mucho al resto de las Islas en relación con la industria turística y el patrimonio cultural y natural. Y han aportado valor añadido al Archipiélago. Que no se desprecie sin más nuestro derecho a defendernos de riesgos idiotas, de peligros inútiles para Lanzarote y para Fuerteventura que, de materializarse, arruinaría nuestro futuro (…). Tenemos derecho a decidir sobre nuestro futuro, a preferir las renovables a las petroleras. Tenemos derecho a primar la seguridad sobre el riesgo.

Llamó a “llenar de indignación la calle el sábado, 24 de marzo”.

La Fundación César Manrique (FCM) convocó en su sede a los medios de comunicación el 20 de marzo. Durante el desarrollo de la rueda de prensa, el presidente de la FCM, José Juan Ramírez, y el director de la institución, Fernando Gómez Aguilera, trasladaron a los medios de comunicación la posición de la FCM con respecto a las prospecciones petrolíferas e hicieron un llamamiento para que la sociedad insular se movilizara.

Concretamente, José Juan Ramírez, manifestó la inequívoca oposición de la Fundación César Manrique a las prospecciones petrolíferas previstas por Repsol frente a las costas de Lanzarote, Fuerteventura y La Graciosa, por los riesgos indiscutibles que se derivan sobre el principal recurso económico de estas islas, el turismo, y sobre su patrimonio natural.

Así mismo, hizo un llamamiento a la sociedad para movilizarse contra las prospecciones petrolíferas y a manifestarse contra la indiferencia y el desprecio del gobierno español hacia el sentir mayoritario de estas tres islas. Se refirió a este momento como un proceso largo en el que la manifestación del día 24 es sólo un punto de arranque de un largo camino que necesitará del aliento de todos. El presidente de la FCM expresó que “este año, que se cumple el 20 aniversario de la muerte de César Manrique, acudir a la manifestación del próximo sábado, es el mejor homenaje que podemos hacerle”.

Además, la FCM se empleará a fondo en desarrollar su oposición al proyecto de prospecciones. Anunció que la FCM recurriría a la vía jurídica, colaboraría en la concienciación social y la movilización, aparte de promover gestiones ante instituciones y organismos estatales y europeos.

Por su parte, el director de la FCM, Fernando Gómez Aguilera, se refirió a la legitimidad del proceso de autorización de las prospecciones y al riesgo que supone una actividad de ese tipo en las costas de dos Reservas de Biosfera como son Lanzarote y Fuerteventura. En sus palabras: Nos enfrentamos a un riesgo descomunal e innecesario para las dos Reservas de Biosfera, a una catástrofe terrible. De producirse un accidente, que, como bien se sabe, no son infrecuentes será una catástrofe ecológica, económica y social.

Respecto a la empresa petrolera Repsol, se refirió a su “discurso tóxico” de marketing expresando Nada que ver con la política de autoabastecimiento energético: Repsol vuelca el producto que extraiga en el mercado internacional, mercado Brent, donde España lo comprará.

Gómez Aguilera también aludió a los que llamó “empresarios de la gran patronal canaria”: Estamos asombrados y disgustados con los pronunciamientos de los diferentes miembros de la patronal canaria, no por que se posicionen a favor del petróleo. No esperábamos otra cosa teniendo en cuenta la acostumbrada finura de sus juicios a la hora de analizar la economía, (…) Nuestro asombro y enfado no proviene de ahí sino de su falta de consideración a Lanzarote y Fuerteventura, a sus instituciones democráticas y a sus ciudadanos. Cada cual puede posicionarse con respecto a este asunto como Dios le dé a entender, pero cuando hay una voluntad institucional y ciudadana tan clara, lo mínimo es pedir respeto. Vamos, que se contengan un poco, que guarden las formas, porque no están hablando de su casa sino de la nuestra, porque si, llegado el momento, hubiera un derrame, la basura, el drama iba a ser para nosotros, no para ellos. Pero quizá el negocio ciega y, de ahí, que nos traten como descerebrados. ¿Qué podemos deducir de sus opiniones públicas? Y recordó algunas de las expresiones de los empresarios. (…) En fin, molesta, que quienes claman y reclaman su propia seguridad jurídica, no duden a la hora de imponernos, si por ellos fuera, nuestra inseguridad de cara al futuro de la mano del petróleo. No acabamos de acostumbrarnos a ese complejo de superioridad de las islas capitalinas, que miren a Lanzarote por encima del hombro del dinero y los negocios como si aquí no se supiera seguir el son de la música. Y a nadie le gusta que le traten como si fuera el patio de atrás de la casa de otro.

También mencionó al empresariado local: Sorprende el silencio o la equidistancia o la asepsia o la distracción de la mayoría del empresariado local, de sus asociaciones, para defender el turismo y defender Lanzarote, su imagen, que tanto les preocupa en el caso de los hoteles ilegales cuando se airea el conflicto en la prensa nacional. Y se desentienden con el petróleo. Su silencio no se entiende y la sociedad toma nota de ello. ¿Callan porque temen enfrentarse al ministro de su ramo (industria y turismo)? ¿Callan por defender sus intereses particulares? ¿Callan porque están de acuerdo con el petróleo y no tienen el coraje de expresarlo públicamente? Pues que sepan que Lanzarote, en la que tantas veces se escudan, les necesita, necesita su pronunciamiento claro, que ya han tenido tiempo de informarse sobre el balance riesgos beneficios. Les pedimos que eleven la mirada y pongan por encima de sus ambiciones a la isla, a sus empleos (más del 75% del PIB insular proviene del turismo) y a las personas.   

Se ocupó en sus palabras del ministro de Energía y Turismo, José Manuel Soria, que fue calificado por Gómez Aguilera como de “ponerle un cero patatero”. Arrogante, antipático, agresivo, insensible con dos islas pequeñas, alejadas, incluso para él, y condescendiente con Valencia. Dos varas de medir, impropias de un ministro de todos los españoles y mucho menos de un ministro canario. Sería deseable —añadió— que el Gobierno de la nación recondujera la actuación del ministro Soria y encauzara esta cuestión, no vaya a ser que un asunto de petróleo acabe convirtiéndose en un problema de Estado. Canarias es zona sensible no sólo medioambientalmente sino también en términos políticos de relación con el Estado.

Por último, a los medios de comunicación, el director de la Fundación César Manrique les pidió respeto y altura de miras con Lanzarote y Fuerteventura. Y también rigor para discriminar y no convertir las mentiras interesadas en verdades acientíficas. César Manrique y Lanzarote les han enseñado mucho al resto de las Islas en relación con la industria turística y el patrimonio cultural y natural. Y han aportado valor añadido al Archipiélago. Que no se desprecie sin más nuestro derecho a defendernos de riesgos idiotas, de peligros inútiles para Lanzarote y para Fuerteventura que, de materializarse, arruinaría nuestro futuro (…). Tenemos derecho a decidir sobre nuestro futuro, a preferir las renovables a las petroleras. Tenemos derecho a primar la seguridad sobre el riesgo.

Llamó a “llenar de indignación la calle el sábado, 24 de marzo”.